INTERROGARSE, TOMAR LA PALABRA, HACER RADIO … UN CAMINO POSIBLE PARA DEMOCRATIZAR LOS SABERES

Desde el Centro de Educación Complementaria 801 de Tres Arroyos reivindican el sentido de la “institución pedagógica”, que excede la mera función de asistencia y cuidado. En esta entrevista, la vicedirectora y dos docentes del “Comple” nos cuentan sobre el proyecto de radio que llevaron adelante, una experiencia que entusiasmó a lxs alumnxs en el peor momento de la pandemia y les permitió explorar una forma distinta de producir conocimiento.

 Utopías en Movimiento: Estamos con las compañeras de Tres Arroyos, del Centro Complementario 801. Me gustaría que se presenten y nos cuenten las características del Centro.

Gabriela: Soy Gabriela Irigoin, soy MGP, maestra del grupo primario. Hace 16 años que trabajo en el Comple, como le decimos cariñosamente nosotrxs, es mi lugar en el mundo. Actualmente trabajo con el grupo de lxs adolescentes, con lxs chicxs más grandes que van al Comple.

Mónica: Mi nombre es Mónica Fernández, soy MGI, maestra de la sala de Jardín. Mi paso por el Complementario comenzó en 2017, hace muy poquito que estoy ahí, transitando en un hermoso lugar, totalmente diferente a lo que venía haciendo yo, que era maestra de Inicial.

Mariana: Mi nombre es Mariana Jensen, el año pasado estaba de maestra de grupo de A2, hace seis o siete años que trabajo en el Centro Educativo Complementario. Durante el contexto de pandemia, en 2020, me postulé para la vicedirección, y actualmente soy vicedirectora de este maravilloso Centro.

UEM: Sabemos que están trabajando con un proyecto particular y muy interesante, que nos gustaría que compartan.

Gabriela: El año pasado, en el contexto de pandemia, pasados los primeros momentos, que fueron de mucha desazón, de mucho acomodamiento para todxs, después de las vacaciones de invierno, nosotrxs veíamos que lxs chicxs estaban como muy desanimadxs, no lográbamos engancharlxs con las tareas. Si bien nuestra función es de complemento -nos llamamos Centro Complementario-, acompañamos las trayectorias, damos una continuidad pedagógica desde ese lugar, tenemos nuestras propias propuestas.

Entonces se nos ocurrió, en realidad se le ocurrió a una compañera, Carina, que es la profe de educación física del Comple, el proyecto de radio. Así que fue un momento de acomodamiento entre nosotras, de ponernos de acuerdo, qué cosas se nos ocurrían que podían hacer lxs chicxs desde la virtualidad. Comenzamos con cuatro micros: uno de entrevistas, uno de deporte, que se ocupaba Carina con lxs demás profes, uno de cocina, que una de las protagonistas era Mariana, y uno de música, que una de las protagonistas era Mónica.

 

Cuando la escuela hace Radio utiliza una herramienta didáctica, genera un espacio cultural. Allí estudiantes y docentes son los protagonistas de un proceso de interacción y socialización con proyección comunitaria. Investigan, se interrogan, toman y dan la palabra

 

A mí me tocaban las entrevistas. Empezamos muy tímidamente con dos compañeras más, unas genias que realmente acompañaron mucho, nuestra orientadora de aprendizaje, Natalia, y mi preceptora en ese momento, Dora. Con lxs chicxs armábamos reuniones de Zoom, empezamos a investigar a quién les gustaría entrevistar, hicimos seis o siete entrevistas locales, empezamos con el Intendente, con el Secretario de Salud, con una persona que hacía cremas, después con un matrimonio que se dedicaba a la agricultura sustentable, todas locales, dos artistas, una profe que teníamos nosotrxs de danzas y un pintor de arte urbano.

Y después ya empezamos a soñar un poquito más. Lxs chicxs empezaron a leer muchas biografías, a escribir entrevistas, hacían preguntas que realmente nos llamaba la atención a lxs docentes de cómo se animaban a preguntar, y entrevistamos a Roberto Baradel. Le hicieron preguntas que en ese momento Roberto nos decía que eran distintas a las de los periodistas. Por ejemplo, le preguntaron si le tenía miedo a algo, qué era lo que más le había dolido de su carrera, o qué era lo más importante, preguntas que les salían muy espontáneas.

Entonces le dijimos a Roberto que queríamos entrevistar al ministro de Educación Nicolás Trotta, él nos hizo el nexo y lo entrevistamos. Fue realmente increíble, empezando por el hecho de que fue un 8 de diciembre, un feriado, nosotrxs estábamos muy protocolares, porque para nosotrxs era un desafío muy importante entrevistarlo, y nos atendió desde su casa, en remera y gorrita, todo muy descontracturado. Realmente nos olvidamos que era el ministro de Educación, fue una conversación muy amena sobre muchos temas, y lxs chicxs entendieron que el ministro era un docente, para ellxs como nosotrxs. En realidad, él se presentó como un maestro más, les habló como un maestro más, jerarquizando la escritura, diciéndoles que lean mucho, que el mundo era para que ellxs lo conquisten, que él era un estudiante como ellxs que ahora es ministro, y que ellxs también podían serlo.

Ese bloque de entrevistas fue increíble, nos queda pendiente entrevistar al Presidente… En la virtualidad es muy difícil poder estar con todxs. Realmente es un proyecto que nos gustaría hacer con muchxs más chicxs. Este proyecto es muy ambicioso y nos gustaría que sea para todxs.

 

“Si todxs trabajamos para lo mismo, siempre sucede algo lindo”

 

UEM: ¿Cómo trabaja el CEC? ¿Articulan con alguna escuela, qué edad tienen estxs estudiantes?

Gabriela: Nosotrxs trabajamos con estudiantes desde el jardín, desde los 3 años, hasta la secundaria, hasta los 18. Sí, articulamos con todas las escuelas. Realmente ahora la articulación, en pandemia, es casi mejor que en presencialidad, porque nos permite a las maestras directamente articular con el nivel, sea Inicial, Primario o Secundario, planificamos juntas. Dentro del desastre que es esta pandemia, la virtualidad, como docentes, nos permitió encontrarnos más fácilmente.

UEM: Mariana, ¿cómo es el trabajo al interior de la escuela desde tu lugar como vicedirectora, y anteriormente como maestra?

Mariana: Cuando hicimos el proyecto de radio, fue una idea que realmente al principio generó resistencias, ya que desconocíamos todo, cómo iba a ser la edición de los micros, cómo lxs chicxs nos iban a acercar las ideas. Armamos subgrupos. Yo estaba en el grupo con dos compañeras más, una era maestra, Agustina, y una preceptora, Fernanda. Nosotras nos encargábamos de compartir mediante WhatsApp o Facebook. Elegimos esos medios porque la mayoría de las familias tenía un teléfono para comunicarse. ¿Qué pasaba? Tuvimos de alguna manera obstáculos en la comunicación, porque ellxs grababan esos micros y se escuchaban las interferencias, después había que editarlos y sacárselas. Más allá de lo trabajado con lxs chicxs, a nosotras nos sirvió mucho. Si realmente hay una voluntad de trabajo en equipo se pueden lograr muchas cosas, y se pueden seguir acompañando desde la virtualidad esas trayectorias y trabajando con lxs chicxs en la medida de lo que podamos, porque realmente la brecha en esta pandemia era una desigualdad educativa que no sabíamos cómo acortarla.

Yo soy una apasionada de mi carrera, de mi trabajo, de ser docente, de ponerle el cuerpo, y el año pasado en el Complementario había mucha carga de frustración. Creo que fue como una bocanada de aire fresco la idea de la radio. Después lo empezamos a disfrutar, pero costó, costó por la resistencia al cambio, y a veces no teníamos la misma respuesta que tuvo Gabriela con las entrevistas. Yo logré tres o cuatro recetas que nos compartían lxs chicxs, había varixs que nos contaban qué les gustaría cocinar, o qué les cocinaba la abuela, qué les gustaba. Disfrutamos todxs los distintos micros, estábamos esperando para ver cuál era la idea que surgía. Eso desde el rol docente.

Como vicedirectora, este año, como ya sabemos de alguna manera qué es lo que sirvió y qué no del año pasado, empezamos a articular mejor con las instituciones y con las escuelas, y tuvimos que trabajar desde la corresponsabilidad y desde un lugar de empatía, de poder ponernos en el nivel, más allá de que todavía nosotrxs no somos consideradxs prioritarixs y no tenemos un protocolo para volver a la presencialidad. Entonces, a veces se nos hace muy difícil acompañar desde esta desigualdad. Pero las chicas están haciendo un trabajo impresionante en la articulación con el nivel y están pudiendo, de alguna manera, acordar sobre un alumno, y realmente tratarlo como matrícula compartida.

Y una de las claves que me parece fundamental es que tuvimos que adaptarnos a la comunicación, ya sea virtual o ese ratito presencial que podemos tener, porque hacemos guardias o nos acercamos a lxs alumnxs que lo necesitan, teniendo en cuenta todo lo del año pasado y lo de años anteriores también, para ver de qué manera podemos seguir acompañando y sosteniendo esas trayectorias.

 

“Somos una modalidad transversal, y las familias nos dejan entrar mucho más fácilmente a sus casas”

 

La Ley de Educación Nacional Nº 26.206 organiza el sistema educativo en Niveles y Modalidades. En este marco, la Ley de Educación Provincial Nº 13.688 reconoce a Psicología Comunitaria y Pedagogía Social como Modalidad del sistema educativo de la jurisdicción, ampliando la perspectiva de la propia Ley de Educación Nacional.

La tarea educativa de la Modalidad Psicología Comunitaria y Pedagogía Social en la Provincia de Buenos Aires queda definida en términos generales en la Ley de Educación Provincial en su artículo 43: “Psicología Comunitaria y Pedagogía Social es la modalidad con un abordaje especializado de operaciones comunitarias dentro del espacio escolar, fortalecedoras de los vínculos que humanizan la enseñanza y el aprendizaje; promueven y protegen el desarrollo de lo educativo como capacidad estructurante del sujeto y de la comunidad educativa en su conjunto, respetando la identidad de ambas dimensiones desde el principio de igualdad de oportunidades que articulen con la Educación Común y que la complementen, enriqueciéndola.

Los Centros Educativos Complementarios son instituciones educativas propias de esta Modalidad cuyos objetivos se enmarcan en la Convención Internacional de los Derechos del Niño y en la Ley de Educación Provincial Nº 13.688. Asumen así, la perspectiva de respeto por la diversidad cultural y la originalidad de los sujetos de aprendizaje, ambos aspectos concebidos como valores humanos.

 

UEM: Mónica, ¿en qué consiste tu trabajo?

Mónica: El mío es el grupo de Inicial, pero debido a esto que nos está pasando desde la virtualidad o cuando estuvimos en la presencialidad, al armar burbujas, no solamente tengo chicxs de jardín, de nivel inicial, sino que también recibo de primaria y trabajo con ellxs en general. Y volviendo al tema de nuestro proyecto, que fue el radial, les cuento un poco en qué consistió con el grupo que tuvimos con mis compañeras docentes y lxs chicxs.

La nuestra era la parte musical, y consistía en presentar un breve informe de algún cantante o grupo musical que lxs chicxs elegían. Contaban sobre su música, elegían algún tema y hablaban de esa letra, con su impronta, lo que a ellxs les parecía, pero también teníamos una partecita que tenía que ver con la familia. Nosotrxs desde el Comple tenemos una flexibilidad que no la tiene el nivel primario, y lo fundamental es la participación de la familia y de la comunidad en general con lxs chicxs. Entonces, del lado musical teníamos la participación de la familia cuando elegían algún tema que los papás recordaban y compartían sus historias sobre en qué momento de la vida lo habían escuchado, por qué lo tenían presente. Trabajábamos desde los recuerdos con la participación de las familias. Esa fue nuestra participación en el micro de radio con la música.

UEM: ¿Qué edad tenían lxs chicxs?

Mónica: Variada, había de cuatro años, de siete, teníamos también una nena de 11. Mi salita es multiedad, de tres a cinco años. Esta propuesta curricular nos da la oportunidad de hacer un trabajo mucho más flexible, mucho más participativo y no tan estructurado como sí lo hacés en el nivel primario o inicial. Eso es lo bueno de trabajar en el Centro Educativo Complementario. Ingresé hace muy poco, pero siento que es muy rico para poder seguir trabajando, y te hace ver las cosas desde otro punto de vista en relación con lxs chicxs y fundamentalmente con las familias.

Gabriela: Mónica tuvo un proyecto impresionante con un nene hipoacúsico. Ella hizo un trabajo espectacular, porque no solamente fue su alumno, que le enseñó desde los hábitos iniciales y se integró totalmente al Comple, sino que lxs chicxs empezaron a hablar en lenguaje de señas. Contale vos, Mónica, porque fue increíble lo que hicieron.

Mónica: Sí, fue una experiencia muy fuerte, en mí, como docente, porque cuando este niño llegó a la sala yo me sentí totalmente superada y sin saber qué hacer, yo no sé lengua de señas, me sentí sobrepasada. Pero recibí mucha ayuda en Dirección, en todo el equipo, también en la Escuela Especial. Mucha participación de personas preparadas para esa situación y del Nivel.

Pero lo que quiero destacar de esto es que a veces nosotrxs, lxs adultxs, complejizamos de tal manera, o nos sentimos sobrepasadxs por situaciones que son fuertes, como la de este nene, Nicolás, pero que realmente no debería suceder así, porque lxs chicxs son lxs que nos enseñan a nosotrxs. Yo llegué a la conclusión, y lo voy a decir siempre, de que sus propixs compañerxs lo ayudaron a Nicolás a sentir que pertenecía a ese grupo, y yo también aprendí eso. Y a mí me dio muchísima tranquilidad ver las cosas desde otro punto de vista, no solamente desesperarnos pedagógicamente porque no se podía aplicar tal secuencia didáctica. A veces nos enloquecemos sin parar un poquito y pensar y mirar a ese que entra todos los días y que quizás nos enseña muchísimo más que los libros que hayamos podido leer. La experiencia es fabulosa, y a mí me enseñó muchísimo.

 

“Democratizar los saberes, que lxs chicxs tengan una participación ciudadana: eso significó la radio y las entrevistas”

 

UEM: La importancia de lxs otrxs, de una institución que acompaña…

Gabriela: Tal cual, la apertura. Además, esas cosas específicas donde uno ve cómo se trabaja en equipo, cómo las propuestas son superadoras cuando todxs trabajamos en pos de la trayectoria o de la inclusión de un alumno. Sea cual sea la cuestión que está rondando, si todxs trabajamos para lo mismo, desde los niveles, desde las modalidades, siempre sucede algo lindo. Un conflicto se puede destrabar, y si todxs nos quedamos en que no se puede… por ahí cuesta, no es todo tan idílico, tenemos problemas, pero a partir de eso suelen salir cosas lindas. Salió lo de la radio, en vez de quedarnos empantanadas y decir, “bueno, lxs chicxs no quieren hacer nada”, salió lo de la radio y fue muy lindo, nos permitió trabajar en equipo, trabajar con las familias. En la entrevista con Trotta estaban todos cambiados, peinados, perfumados, aunque era por Zoom. Nos metimos en los hogares y nos sentimos parte de cada casa también.

 

“El lenguaje – expresa Pierre Bourdieu– no sólo es un instrumento
de comunicación o incluso de conocimiento, sino que es también
un instrumento de poder. No sólo tratamos que nos comprendan
sino también que nos crean, obedezcan, respeten, reconozcan…”(1977)

 

Desde el Centro Complementario somos una modalidad transversal y me parece que las familias nos dejan entrar mucho más fácilmente a sus casas

 

Mariana: El Centro Educativo Complementario, como institución de la modalidad, va más allá de lo pedagógico, la formación de la persona, el desarrollo de cada individuo. Como nosotrxs no acreditamos, tenemos que trabajar todos los días lo vincular. Somos unas convencidas de que el alumno que no puede establecer un vínculo con su docente, ya sea virtualmente o presencial, es muy difícil que aprenda, que pueda estar institucionalizado, que pueda desarrollarse, encontrar el lugar donde pueda sentirse contenido, apoyado, sostenido, porque tenemos tanta vulnerabilidad educativa, no solo desde lo social, sino que muchas veces se ve un abandono desde lo pedagógico porque el Nivel a veces se encuentra sobrepasado. Hay escuelas muy grandes en las que algunxs se pierden. Para eso estamos nosotras, y nos permiten ser parte de sus vidas.

Los CEC tratan de generar condiciones institucionales que favorezcan:

En los alumnos: la integración de conocimientos y su aplicación en situaciones que vulneran el derecho a la educación; la expansión de conocimientos a partir de diferentes oportunidades de aprendizaje conceptual y práctico

En las familias: el empoderamiento para buscar y aplicar estrategias que faciliten el sostén de los hijos en las instituciones educativas;

En la comunidad: la construcción de redes sociales que posibilitan su rol activo y la participación autogestiva para la resolución de problemas que atañen a la dignidad y al bienestar de sus actores.

Tenemos ex alumnxs, hijxs y nietxs de ex alumnxs. Yo hasta ahora de lxs que me he cruzado ningunx me dijo que no le gustó pertenecer al Centro Educativo Complementario. Dejamos huellas y marcas muy valiosas para el resto de sus vidas. Y eso es lo que a nosotras nos da ganas de buscar un proyecto innovador, y que se enganchen, porque lo disfrutamos a la par, lo disfrutamos con ellxs. Eso es lo lindo del Centro Educativo Complementario.

UEM: ¿Cómo está organizado, quiénes forman el Centro?

Mariana: Está el equipo de conducción, la directora, Liliana Arriegue, vicedirectora, y la secretaria, Gabriela Morán. Después, hay un equipo de orientación escolar con una orientadora del aprendizaje, Natalia Rangone, una orientadora educacional, Geraldine Poulsen Hornum, una fonoaudióloga, Giselle Riat, y una orientadora social, Jorgelina Gutiérrez. Y después tenemos docentes del turno mañana, que está conformado por el grupo D1, que es de nivel inicial, que es Mónica Fernández, que está con nosotrxs, el grupo A1, que no está definido porque estamos por burbujas, pero es Lina Pérez, el grupo A2, que es Florencia González y el grupo A3 que es Gabriela Irigoin. Además, están las MGP Agustina Liebana y Laura D’Onofrio; Mirta D’Agostina, Dora Rodriguez, Sol De la Rosa, Fernanda Fioritti y Nadia Fernández (PR); Karina Arana, Diego Dalessandro y Maria Bardelli (EFI).

 

“Desde un proyecto podemos armar infinidades de secuencias, desde lo presencial, desde lo virtual y desde lo que implica la creatividad docente”

 

UEM: Y estos cuatro agrupamientos son de distintas edades. Vos, Gabriela, tenés a los más grandes…

Gabriela: Sí, yo tengo a los más grandes, que son desde 4to año de la primaria, hasta la secundaria, porque como van a contraturno, lxs chicxs que van a la tarde a la secundaria, van a la mañana conmigo. Después están de 1ro, 2do y 3ro, Moni, que tiene Inicial, a la mañana. Nosotras tenemos doble cargo.

UEM: Gabriela, vos decías que en pandemia fue hasta casi más fácil la articulación con los docentes del nivel. ¿Por qué te parece que fue así y qué cosas se debatieron en esa articulación?

Gabriela:  Ahí está el quid de la cuestión. Lo que seguimos debatiendo y seguiremos debatiendo. Yo creo que es por una cuestión de tiempo. Si bien es un caos en la pandemia porque uno trabaja las 24 horas, hay chicxs que no tienen conectividad y se pueden conectar a las 8 de la noche, yo no les puedo decir que yo estoy hasta las 5, uno tiene que ser flexible, o por lo menos yo soy flexible. Y me parece que eso pasó con lxs profes y lxs docentes de todos los niveles. Nos fuimos acomodando, y de alguna manera esto del Zoom nos permitió acercarnos, juntarnos para hacer un curso, una reunión y debatir cosas. ¿Qué estrategia usamos para llegar a este chico? ¿Qué contenido prioritario sería para la propuesta curricular? ¿Qué hacemos, qué no hacemos? Me parece que todavía nos falta mucho para discutir y que tendríamos que aprovechar estas cosas.

Estoy convencida de que tendríamos que discutir sobre qué concepto de alumnx tenemos antes de ponernos a trabajar. Para mí en febrero tendríamos que discutir qué institución queremos y qué alumnx tenemos cada unx en la cabeza. Las representaciones de lxs docentes sobre sus alumnxs es un tema pendiente de la educación. Es un debate que debería darse muy profundamente en las instituciones. Durante la pandemia a mí me pasó de encontrarme docentes que no conocía compartiendo alumnxs, y poder llegar a un acuerdo. Eso me parece positivo, dentro de todo lo malo. Si las trayectorias de lxs chicxs antes eran vulneradas, ahora lo son mucho más, pero el encuentro entre docentes fue positivo.

UEM: Gabriela, dentro del proyecto de radio, ¿alguna secuencia que vos hayas trabajado con tus estudiantes, o cómo utilizaste la radio para esa secuencia?

Gabriela: La secuencia fue planteada desde el inicio. Desde que se planteó el tema de la radio lo primero que se trabajó fue la lectura de biografías, elegir las personalidades que íbamos a entrevistar, trabajar en la biografía, en la lectura, la trabajábamos por Zoom o por videollamadas. Primero la lectura y después la escritura sobre esas personas, cuestiones que nos interesaban preguntar y hacia dónde dirigir las entrevistas. Por ejemplo, Roberto Baradel era hacia un lugar, los artistas hacia otro. Cada 15 ó 20 días hacíamos las entrevistas, y en ese interín trabajábamos sobre cada persona, sobre cada biografía.

Y después también trabajábamos en detalles como quién comenzaba a hablar, quién continuaba, quién saludaba al entrevistado, quién lo despedía. Al principio fue un caos, pero después, con Trotta trabajaron casi solxs, no tuvimos intervención nosotras las docentes, estábamos acompañando. Ellxs hacían sus propias intervenciones y se animaban a poner en las entrevistas cosas de sus propias experiencias. Fue algo que nunca se lo hubiesen imaginado, pensar que iban a hablar con un ministro. Les abrió y nos abrió un montón la cabeza.

 

“Si bien nosotrxs complementamos con las escuelas de origen de lxs chicxs, también afianzamos esos conocimientos y nuestra expectativa siempre es apuntar a más”

 

UEM: ¿Cuál fue el mayor impacto de haber transitado por la experiencia de la radio, para ustedes como profes y para lxs chicxs?

Gabriela: Para mí, fue sentir con lxs chicxs que participamos de una vida ciudadana, ser ciudadanxs, preguntarnos e investigar sobre cosas de la vida cotidiana. Y en la radio poder transmitirlo. Los felicitaban a lxs chicxs por cómo se habían desenvuelto en las entrevistas, cómo ellxs pudieron cuestionar la realidad o decirle al Intendente: “si hay tantas picadas y usted está preocupado, ¿por qué no hace algo?” Nadie se lo había dicho, y lxs chicxs se lo dijeron. Hacían preguntas sin prejuicios. Para mí fue como democratizar los saberes. Eso que tanto leemos en las circulares y en los documentos, fue vivirlo con ellxs. La participación ciudadana, para mí, significó la radio y las entrevistas.

Mariana: Para mí la radio fueron muchas cosas. Desde el lugar de lxs alumnxs, yo sentí que era un proyecto que recién estaba naciendo, un proyecto que tenía y tengo la necesidad de seguir trabajándolo. Porque era un grupo muy chico –yo tenía a lxs chiquitxs de 7, 8 años- y no tenían conectividad. Se hacía lo que se podía. Pero lo que sí representó fue el desafío de poder ver más allá de las barreras del aprendizaje, que no todo se remitía a un cuaderno y un lápiz, como estábamos acostumbradxs. Poder abrirlo a la comunidad de Tres Arroyos y poder decir “acá viene la radio del CEC”, poder escucharse. Estar acostumbradxs a no vernos las caras por mucho tiempo, y escuchar las voces y poder reconocer la voz de cada unx de ellxs.

El trabajo en equipo. A más de una se nos borraban los micros, no podíamos editarlos, en mi caso se me rompió la computadora, se me quemó la placa de audio de tanto que le metí mano, porque quería que saliera bien.

Fueron muchas cosas buenas, pero lo que más rescato es el hecho de haber podido lograr un proyecto en la virtualidad siguiendo conectadxs. La radio entraba en todos los hogares. Nosotras estábamos preocupadas porque no todxs tienen computadora, no todxs tienen teléfono, nos encontramos también con el obstáculo que al no tener wifi se consumían los datos.

Son cosas que nos sirven para ver qué cosas podemos mejorar, qué es lo que podemos seguir creando, innovando. Y ver que lxs chicxs se pudieron revincular con un montón de contenidos pedagógicos que no se limitaban a la lectura y escritura desde el formato papel. Trabajar la oralidad, mostrarse, porque muchxs no se animaban ni siquiera a mandar un audio por WhatsApp. Todas estas cosas, muchas veces, en lo presencial no se trabajan, porque lo damos por obvio, por hecho. Desde un proyecto podemos armar infinidades de secuencias, desde lo presencial, desde lo virtual y desde lo que implica la creatividad docente. No nos quedamos en lo que es el currículum propiamente dicho o los contenidos propios del Centro Educativo Complementario.

Mónica: Para mí y para mis alumnxs, fue un desafío en el aprendizaje. En el aprendizaje a partir de este nuevo formato que tenemos, el de la virtualidad, la tecnología, el uso del celular, para mí fue un gran desafío. Y salir un poco del formato al que estamos tan acostumbradxs fue una forma de interpelarnos en el día a día. Y tomando lo que decía Gabriela, sobre la participación ciudadana, creo que fue muy importante. El hecho de que en la ciudad se nos haya escuchado está buenísimo, visibilizar que nosotrxs tenemos nuestra propia propuesta de enseñanza, y sacar un poquito quizás del imaginario social que se tiene con respecto a los CEC, como que es una forma de asistencialismo. Si bien nosotrxs complementamos con las escuelas de origen de lxs chicxs, también afianzamos esos conocimientos y la expectativa nuestra siempre es apuntar a más.

Recalcar que hayan podido escuchar y ver que es mucho más que en lo que la sociedad se tiene como concepto de lo que significa la llegada a un CEC.

Gabriela: No queremos más que digan que en el CEC están lxs chicxs pobres que necesitan ayuda. Muchas veces en el imaginario social todavía estamos con esa concepción. Y en realidad acá se juntaron chicxs que sabían preguntar. Y hasta ellxs mismos se asombraron, porque muchas veces son estigmatizadxs en el mismo nivel al que van. Por ahí les dicen “Ay, ¿vas al Comple?”. Entonces, nuestra idea también es hacer propuestas superadoras para dejar de ser vistos como una institución de asistencia y cuidado solamente, y revalorizar ese aspecto de que somos una institución pedagógica.

 

“Si las trayectorias de lxs chicxs antes eran vulneradas, ahora lo son mucho más, pero el encuentro entre docentes fue positivo”

 

UEM: Y este año, ¿tenemos radio?

Gabriela: Por ahora, no, porque estuvimos volviendo y volvimos de nuevo a casa. Ahora los niveles volvieron, todavía nosotrxs no. Estamos tratando de ayudar en las trayectorias educativas, que están muy complicadas, discontinuas, en proceso. Así que estamos intentando colaborar con eso y afianzar nuestra propuesta.

Mariana: Estamos tratando de revincular a lxs chicxs con la escuela. Hay mucho ausentismo y la escuela tiene la presión de que tiene que acreditar. Entonces, estamos tratando de trabajar en la articulación para sostener un poco a estas familias y acompañar, porque el nivel es obligatorio. El Centro Educativo Complementario no es obligatorio, pero puede acompañar y puede complementar al nivel. Estamos poniendo todo nuestro esmero y nuestro énfasis en que lxs chicxs vuelvan a la escuela.

El proyecto de radio queda pendiente, también para los años más grandes. La secundaria, sobre todo, volviendo a lo que decía Gabriela sobre lo ciudadano, la construcción de ciudadanía de cada unx de ellxs, la adolescencia, que es tan importante, para continuar este proyecto de radio y de alguna manera fortalecer esas infancias.